Histórica victoria para meterse en semifinales

Argentina derrotó a 97-87 a Serbia y se metió entre los cuatro mejores. Ahora en las semifinales espera por Francia o Estados Unidos

En el Dongguan Arena y por los cuartos de final, Argentina y Serbia se medían buscando meterse entre los cuatro mejores de la copa del mundo. El primer cuarto «El Alma» arrancó ganando y estando bien ofensivamente, llegando a tener un parcial de 12-4, pero los europeos mostraron algo de su jerarquía para igualar las cosas en 16. De ahí en lo que quedó del periodo, los balcánicos llegaron a tomar la ventaja por un punto, pero no lograron mantenerla y los del «Oveja» Hernández lo cerraron 25-23.

El segundo cuarto ambos mostraron su poderío ofensivo, destacando en Argentina Luca Vildoza, que estuvo enchufado metiendo tres triples claves, al igual que Patricio Garino, que metió dos. Por el lado de Serbia, los jugadores NBA como Nikola Jokic y Bogdan Bogdanovic fueron sus principales cartas ofensivas, reluciendo su jerarquía y siendo también las principales opciones de descarga de cara al aro de su equipo.

En el tercer cuarto, Serbia apretó mucho y sumado a la baja en la intensidad del ataque argentino, terminó cerrándolo 68-67. El aporte de Marcos Delía fue fundamental en los dos aros para resistir a los gigantes serbios.

Argentina jugó un glorioso último cuarto, ya que con Facundo Campazzo y el inagotable Luis Scola como abanderados, se llevó por delante a la gran potencia que es Serbia, mostrando un gran juego táctico e inteligente, incluso llegando a florearse con algunos lujos, como un pase de caño de Nicolás Laprovittola. También supo como jugar ante el nerviosismo y desesperación de los balcánicos, que con algúnos triples con marca encima de Bogdanovic, intentaron acercarse.

De esta forma, Argentina cerró el encuentro 97-87 y derrotó nada más ni nada menos que al favorito a llevarse el certamen. Ahora volverá a estar entre los cuatro mejores, algo que no lograba desde el mundial de Japón en 2006 y su rival saldrá del cruce entre Francia y Estados Unidos.

Esta no es la primera vez que estas selecciones se cruzan, dado que Argentina ya tuvo enfrentamientos ante los europeos pero con distintas denominaciones en lo que va del siglo, ya que en 2002 y como Yugoslavia, se enfrentaron en la final del mundial de Indianapolis, la cual fue victoria para los balcánicos 84-77 pero con mucha polémica. Luego, se volvieron a ver las caras en el primer partido del grupo A por los Juegos Olímpicos de Atenas en 2004, pero esta vez como Serbia y Montenegro, en el que se recuerda el agónico triunfo 83-82 de la Generación Dorada con la inolvidable palomita de Manu Ginobili para cerrar el partido en lo que sería el principio del camino para la medalla de oro conquistada en esos juegos.

El próximo encuentro será el viernes desde las 9.00 y El Alma irá en busca de la gran final.

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