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En medio de la disputa dirigencial, Vélez jugará la Liga Femenina

Las Fortineras dirán presente en uno de los torneos más importantes del vóley argentino.

Luego de quedar eliminadas del Torneo Oficial Metropolitano en instancia de octavos de final, las jugadoras de Vélez vuelven a sonreír; podrán disputar la Liga Argentina Femenina 2022. De un tiempo a esta parte, la disciplina atraviesa uno de los peores momentos de su historia, debido a conflictos con los mandatarios del club de Liniers.

Tras el éxodo de jugadoras por la mala gestión, ahora la dirigencia las autorizó a participar en el torneo nacional, pero les soltaron la mano en lo económico. Mejor dicho, nunca se las agarraron. Deberán jugar con las deportistas de las categorías menores, pagar todos los gastos, y corren riesgo de descender.

¿Cuál había sido el conflicto?

El problema se arrastraba desde hace tiempo, pero el 21 de agosto de este año las últimas campeonas de la Copa Metropolitana dijeron «basta«. Al no recibir respuestas por parte de Adrián Peláez, el responsable de gestionar el presupuesto de la actividad, las deportistas decidieron no jugar los partidos hasta que la situación se esclarezca.

Con idas, vueltas, destrato, faltas de respeto y una colecta de dinero por redes sociales de por medio, las jugadoras volvieron a saltar a la cancha. Debido a esta situación crítica, y sabiendo que Vélez les había negado la posibilidad de disputa la Liga Argentina Femenina 2022, muchas jugadoras tomaron la decisión de emigrar al exterior o a clubes argentinos con mayor estabilidad.

Sol Piccolo y Malena Giaccaglia partieron rumbo a Francia, Julieta Cervini es actual jugadora de Barcelona, Laila Romero y Carla Martinelli también juegan en España, Sofía García partió rumbo a Grecia. Por su parte Lucía Verdier continúa su carrera en el vóley de Perú, Agustina Luengas en Portugal, y hay que destacar que luego de la obtención del último título, la excapitana Antonela Curatola se retiró del vóley.

Además, la última derrota ante UNLaM, fue también el último partido de Ariana González y Stefanía Rodríguez con la camiseta del Fortín. Lo cierto es que Vélez siempre fue un club que se caracterizó por hacer hincapié en las divisiones inferiores, y los entrenadores del vóley lo tienen más que claro.

Guillermo Nazabal sabiendo que no contaba con sus máximas figuras, comenzó a foguear a las más chicas. Hoy en día, son ellas las que le pondrán el pecho a la próxima competencia, ya que el entrenador les dejó vía libre a las más grandes para que puedan competir en otros clubes.

¿Bajo qué condiciones se jugará la Liga?

Los dirigentes ya les anticiparon a las jugadoras y al cuerpo técnico que no recibirán apoyo por parte del club. Es decir que todos los gastos que implica la participación de la competencia, los costearán desde la propia actividad. Inscripción, viajes, y todo lo que conlleva una liga, saldrá del bolsillo del equipo. Vélez continuará brindando el espacio de entrenamiento, pero del resto se harán cargo las jugadoras que representen al conjunto de Liniers.

¿Qué significa esto?

Desde la perspectiva de los mandatarios, las jugadoras ya tienen lo que querían que es disputar el torneo. Pero ahora, hay que tener en cuenta que las deportistas que quedaron son muy jóvenes y será un peso enorme para ellas tener que madurar de golpe. Deberán ponerse al hombro la camiseta de Vélez, y asumir el compromiso no solamente de disputar la Liga sino también el Torneo Metropolitano, teniendo en cuenta que en 2022 retornan los descensos.

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